MARCO REFERENCIAL
La acción evangelizadora de la Iglesia de Aguarico tiene su punto de partida:
- En la realidad pluricultural del Vicariato
- En la realidad socioeconómica actual de empobrecimiento, injusticia y desigualdad que sufren los pueblos indígenas y colonos.
Se compromete a una nueva evangelización que, a partir de la comunidad y de la formación y responsabilidad de los laicos, tienda a una iglesia ministerial, participativa y corresponsable.
Apoya la formación de una iglesia local, inculturada y misionera que, partiendo de las Semillas del Verbo y de los valores culturales indígenas y colonos, vive y expresa su fe desde ellos.
Asume la opción preferencial por los pobres, los jóvenes y las vocaciones, en comunión con la iglesia universal y latinoamericana manifestada en las Conferencias Generales del Episcopado Latinoamericano de Medellín, Puebla, Santo Domingo y Aparecida y aplicada en la Iglesia Ecuatoriana.
Vive con las comunidades la fe en el seguimiento de un Cristo liberador, pobre, servidor, entregado al Padre y al pueblo.
Vive comprometida con el pueblo y acompaña a sus organizaciones, y junto a ellos colabora en la construcción de una sociedad nueva que se basa en el respeto de la naturaleza como obra de Dios y de la persona como imagen de Dios.
Manifiesta su espiritualidad en la oración, la vivencia fraterna y en la planificación, realización y evaluación conjunta del trabajo pastoral.
Junto al obispo, que preside la comunión, encuentran en esta iglesia su lugar propio las comunidades, los laicos, los sacerdotes, las religiosas y los religiosos con sus diversos carismas.
Nos han precedido en este camino nuestros hermanos mártires Alejandro e Inés.